Serena Williams venció el sábado a su hermana Venus por 6-4 y 6-4 en la final del Abierto de Australia, logrando su vigésimo tercer título individual de un Gran Slam y convirtiéndose en la jugadora más exitosa en la era de los abiertos.
La victoria de la estadounidense de 35 años le dio su séptima corona en Melbourne Park y la aupó por encima de la alemana Steffi Graf en lo más alto de la lista de ganadores de torneos Grand Slam desde que el deporte se hizo profesional en 1968.
La segunda cabeza de serie superó un flojo servicio para darle la vuelta al primer set y una ruptura del saque de Venus, de 36 años, fue suficiente para ganar el segundo tras 82 minutos de juego en el Rod Laver Arena.
La victoria aseguró a Serena, que logró 10 puntos directos de saque y 27 golpes ganadores, recuperar el lunes el número uno mundial de la alemana Angelique Kerber.
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