La moneda argentina cerró en 38,83 pesos por dólar este viernes, último día hábil de 2018, año en el que la depreciación superó 50%, en medio de una crisis económica que llevó al gobierno de Mauricio Macri a pactar un respaldo financiero con el FMI.
El peso había comenzado el año en 18,73 unidades por dólar y hasta este viernes se depreció 51,76%.
Argentina sufrió en 2018 dos grandes corridas cambiarias: la primera entre abril y mayo, que provocó una depreciación de alrededor de 20% y la pérdida de 10.000 millones de dólares de reservas internacionales; y la segunda en agosto, cuando en apenas un día el peso cayó 13%.
En las dos ocasiones, el gobierno de Macri acudió al Fondo Monetario Internacional por un auxilio que suma en total unos 56.000 millones de dólares hasta 2020, de los cuales Argentina ya ha recibido 28.000 millones.
A cambio, se comprometió a llevar adelante un plan de austeridad que implica lograr el equilibrio fiscal en 2019.
De un déficit fiscal primario que en 2017 cerró en 3,9% del Producto Interno Bruto, Argentina tendrá que alcanzar la cifra cero en 2019.
Para contener la presión sobre la moneda, el Banco Central aumentó las tasas de interés a lo largo del año hasta un índice de referencia de 60%, aunque en la práctica, para operaciones como la remuneración de las Letras de liquidez llegó a picos de 78% anual.
En ese contexto, el crecimiento económico se contrajo y el país entró en recesión, con un acumulado en el periodo enero-septiembre de -1,4% del PIB.
El FMI ha proyectado una caída de la economía de 2,6% para 2018 y de 1,6% en 2019.
Fuente: http://bit.ly/2BLoaao
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