La producción industrial de Brasil creció 0,3% en septiembre, segundo mes consecutivo en alza, sin embargo en los primeros nueve meses del año acumula una caída del 1,4% respecto al mismo periodo de 2018, según datos oficiales divulgados este viernes.
El acumulado de los últimos doce meses también registró un retroceso del 1,4%, informó el Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE).
El resultado fue inferior al 0,9% pronosticado por 37 consultorías consultadas por el diario económico Valor.
Comparado con septiembre de 2018, el indicador registró un crecimiento de 1,1%.
El resultado de agosto fue revisado para un avance de 1,2%, superior al balance de 0,8% divulgado anteriormente.
Tres de las cuatro principales categorías consideradas para el cálculo mostraron números positivos. Bienes de consumos durables fue la de mayor expansión (2,3%) y bienes de capital fue la única con retroceso, cerrando el mes con un saldo negativo de -0,5%.
El instituto de estadísticas precisó, además, que apenas 11 de los 26 ramos estudiados mostraron un avance.
El sector automotriz fue el principal responsable del resultado positivo con un alta del 4,3%, revirtiendo el retroceso de agosto, informó el IBGE.
«Entre los catorce ramos que redujeron la producción los desempeños de mayor importancia fueron: impresión y reproducción de grabaciones (-28,6%), industrias extractivas (-1,2%), máquinas y equipos (-2,8%), productos farmaquímicos y farmacéuticos (-4,6%) y derivados del petróleo (-0,8%)».
El gobierno de Jair Bolsonaro lanzó desde su llegada al poder en enero un programa de ajustes fiscales y privatizaciones, con el fin de recuperar la confianza de los inversores como fórmula para dinamizar a la mayor economía latinoamericana.
Pese a una aprobación de la reforma de las jubilaciones, los resultados se hacen esperar. Las expectativas del mercado son de un crecimiento económico del 0,91% para este año, por debajo del 1,1% de 2017 y 2018.
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