La Fiscalía de Venezuela anunció una «exhaustiva» investigación por la muerte de un militar detenido por una presunta conspiración para derrocar y asesinar al presidente Nicolás Maduro, que la oposición y organizaciones de derechos humanos denuncian fue producto de «torturas».
El Ministerio Público decidió «adelantar todas las diligencias correspondientes que permitan determinar las causas» del fallecimiento del capitán de corbeta Rafael Acosta Arévalo, uno de los 13 detenidos por el supuesto complot, y «determinar las responsabilidades a que haya lugar», informó el fiscal general, Tarek William Saab en Twitter.
Saab, de línea oficialista, prometió garantizar una «investigación objetiva, independiente e imparcial en pleno respeto al Estado de Derecho».
El funcionario no hizo referencia a las denuncias de «torturas».
La reacción de Saab se produjo después de un comunicado del gobierno de Maduro en el que le solicitó al Ministerio Público actuar.
Ante la muerte de Acosta, «imputado por graves actos de terrorismo, sedición y magnicidio en grado de frustración», Maduro pidió al fiscal «una completa y exhaustiva investigación para esclarecer este lamentable suceso», señaló un comunicado oficial divulgado en Twitter por el ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez.
El jueves el propio Rodríguez informó que Acosta estaba entre los arrestados por el caso.
El gobierno sostiene que planificaba un «golpe de Estado», que fue frustrado por la acción de agentes infiltrados y que era liderado por el líder opositor Juan Guaidó, jefe del Parlamento de mayoría opositora reconocido como presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países.
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