El economista y calificador de riesgo bancario, Leonardo Buniak, aseguró que el comportamiento del mercado petrolero internacional no se ha visto ni se verá afectado por la próxima llegada de cinco tanqueros que transportan combustible iraní para Venezuela y descartó cualquier posibilidad de intervención por parte de los Estados Unidos.
Durante una entrevista radial en el programa Penzini con Todo, el experto en materia económica señaló que los mercados internacionales no reconocen una prima de riesgo geopolítico en torno a las operaciones entre Irán y Venezuela. «Es falso que va a haber una suerte de intervención de Estados Unidos porque eso no está planteado, y una vez que estos barcos están en zona económica exclusiva de Venezuela, mucho menos riesgo existe de que eso puede pasar».
A su juicio, las presunciones de que Estados Unidos aborde a los tanqueros iraníes que se dirigen al país, son parte de una guerra de información para crear matrices de opinión.
Asimismo, el también analista geopolítico y geoeconómico, afirmó que tanto Irán como Venezuela tendrán que enfrentar, posiblemente, sanciones más duras por parte del gobierno norteamericano.
Estados Unidos ha señalado que está considerando qué medidas tomar en respuesta al envío de combustible de Irán a Venezuela y aseguran que el gobierno venezolano paga a Teherán con toneladas de oro.
Sobre el panorama petrolero mundial, afectado por la pandemia de Covid-19, Buniak consideró que «lo peor de la crisis ya pasó», dado que la etapa de confinamiento en la mayoría de las naciones prácticamente ya está terminando, lo que dará paso a una etapa de estabilización y más tarde a un proceso de recuperación del mercado petrolero.
No obstante, sostuvo que el restablecimiento de la demanda de crudo a niveles previos a la pandemia no será cuestión de poco tiempo, sino que tomará entre 18 a 36 meses volver a ver una recuperación del mercado.
En ese sentido, señaló que ese panorama complica la situación de Venezuela, cuya economía es monoproductora, monoexportadora y monodependiente de los ingresos petroleros en un 97%, pues la producción de crudo en el país, hasta el mes de abril, había caído vertiginosamente a mínimos de 620.000 barriles diarios.
«No tenemos acceso a financiamiento internacional, tenemos un hundimiento del mercado petrolero con un barril de petróleo que cada día genera menos caja; el panorama para el país es tremendamente complicado», aseguró el economista, y aseveró que la cuarentena impuesta en Venezuela para aplanar la curva de contagio del Covid-19, ha provocado una mayor contracción de la economía, por lo que se requeriría una mayor capacidad fiscal para atenuar dicho impacto.
Buniak agregó que «por esas razones se ha pedido tantas veces la creación de un Gobierno de Emergencia Nacional«. Estima que Venezuela puede pasar, de una crisis humanitaria, a una verdadera catástrofe humanitaria como consencuencia del aislamiento que, a su juicio, tiene un costo muy alto en términos de recesión.
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