La autoexclusión de Venezuela de la Organización de Estados Americanos (OEA) traería graves implicaciones desde el punto de vista político y económico para la nación. El crédito de organizaciones como el Banco Interamericano de Desarrollo, entidad vinculada institucionalmente con la OEA, estaría bloqueado, “el riesgo- país de la República se elevará y el buscar quién le preste al Gobierno será una tarea cuesta arriba pues nadie querrá hacer alguna transacción con un país que cada día se aísla más”.
Así lo opinó el presidente del Colegio de Internacionalistas de Venezuela, Juan Francisco Contreras, en entrevista con http://ift.tt/1sQTs7p.
Advirtió que “si Venezuela busca nuevo endeudamiento lo haría a tasas de interés muy altas y el riesgo de default aumentaría. Es una irresponsabilidad que el Gobierno de Maduro intente salirse de la OEA. Es una decisión trascendental que debe consultarse al país y no obedecer a un capricho personal. Es la primera vez que un país toma una decisión tan drástica. En la historia de la organización, ni Pinochet ni Somoza se retiraron, Maduro y su Canciller sientan un precedente muy negativo con la acción”.
Añadió el también docente de la Universidad Central de Venezuela que en caso de que pasen los dos años reglamentarios para que Venezuela abandone la OEA, “no podría hacer negocios con sus países miembros, en especial con Estados Unidos, y seguro comprador y vendedor de petróleo al Gobierno. Tampoco recibiría préstamos de organismos multilaterales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), entidad que financia a obras para el sector público del continente.”
Si en dos años prospera la moción, Venezuela y Cuba serán los dos únicos países del hemisferio fuera de la entidad multilateral.
La nación caribeña fue expulsada en enero de 1962 de la OEA, en el contexto de la Guerra Fría, por su adhesión al bloque comunista liderado por al Union Soviética. En 2009, la OEA aprobó el reingreso de Cuba a la entidad peor el Gobierno de Raúl Castro no aceptó la invitación que le hiciera la comunidad internacional.
¿Sanciones económicas?
-¿Habría algún tipo de sanción comercial al Gobierno?
– En este caso no. Si Venezuela hubiese sido suspendida de la OEA, quizá hubiese algún tipo de sanción comercial. Pero es obvio que el aislamiento traerá consecuencias desde el punto de vista económico. Se afectaría aún más a la población que sufre los rigores de la escasez en un país en donde no hay dinero suficiente para importar.
– ¿Cómo queda la posibilidad de que el Gobierno busque nuevos préstamos en el ámbito internacional?
– Si miramos la situación como extrema, el país no podría recibir créditos para resolver situaciones de apremio. Nadie va a querer prestar dinero a una nación aislada y los indicadores de los bonos de la República estarán en sus peores momentos. Maduro tiene una gran presión y en sus manos estará la decisión, si se radicaliza aún más y aísla definitivamente del concierto regional, con las graves consecuencias que eso traería.
Dijo que trascendió en el mundo financiero internacional que el Ministro de Comercio Exterior, Jesús Farías, está de gira por varios países para buscar financiamiento al Gobierno de Maduro, “y una de las puertas que tocó fue la del BID, muy recientemente. Esto evidencia la incoherencia y la improvisación del Gabinete Ejecutivo”, añade Contreras.
Añadió que al menos unas 20 comisiones y grupos de trabajo que se deriva de la OEA no prestarían asesoría y apoyo técnico al país: Organización Panamericana de la Salud, Instituto Interamericano del Niño, la Niña y Adolescentes,Secretaría para el Fortalecimiento de la Democracia, Departamento para la Cooperación y Observación Electoral y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, entre otros.
Juan Francisco Contreras señaló que el actual Gobierno de Venezuela, “se ha caracterizado por destruir procesos de integración tan exitosos como lo fue la Comunidad Andina de Naciones, en donde economías de la región comerciaban con fluidez, en un contexto de complementariedad. Chávez decidió salir de la CAN para ir al Mercosur y con la intención de politizarlo. Ahora, con el nuevo escenario regional, el Mercosur tampoco le conviene a esta Venezuela la cual está a punto de ser suspendida por el enorme déficit democrático del Gobierno de Maduro”.
–El tema de la no injerencia en los países en crisis es uno de los argumentos que esgrime Venezuela para irse de la OEA….
– La OEA no es injerencista porque sus 34 integrantes firmaron pactos de adhesión a ese organismo, que tiene unas reglas que se deben cumplir, como por ejemplo el respeto a la Democracia y a los Derechos Humanos, como puntos fundamentales.
Aseveró que los que defienden la tesis de la “no intervención extranjera” deben recordar que Hitler cometió crímenes atroces en la Alemania nazi, invocando al principio de la no intervención.
–¿Qué papel ha jugado el Secretario General Luid Almagro en esta crisis?
– El Secretario Almagro está cumpliendo las funciones que le encomendaron los 34 países miembros de la OEA cuando lo eligieron. El proviene de un Gobierno de izquierda del Uruguay- en donde fue el canciller del ex presidente Mujica- y eso no lo faculta para colocarse al lado de un régimen autoritario que se define de izquierda. Almagro está haciendo cumplir la Carta Democrática de la cual Venezuela fue firmante y entusiasta proponente. El que quiera más Democracia y más respeto a los Derechos Humanos en el Continente, engrandece la labor del Secretario General.
Fuente: http://ift.tt/2qsviRW
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