El gobierno de Venezuela declaró el domingo su “preocupación” por manifestantes “fuertemente reprimidos” en Francia, donde protestas contra el presidente Emmanuel Macron han derivado en violentos disturbios.
“Venezuela manifiesta su preocupación por los recientes acontecimientos” en Francia, “donde miles de manifestantes protestando por la ejecución de medidas económicas impopulares han sido fuertemente reprimidos por los cuerpos de seguridad, dejando decenas de heridos y detenidos”, señaló un comunicado de la Cancillería.
El movimiento de los “chalecos amarillos”, bautizado así por las chaquetillas de alta visibilidad que usan millares de manifestantes, denuncia el alza de los combustibles y la pérdida de poder adquisitivo en el país europeo.
Unas 100.000 personas protestaron el sábado en distintas ciudades de Francia, 8.000 en París, según el ministerio de Interior, que reportó unas 130 detenciones.
Incidentes de violencia en París dejaron 24 heridos, cinco de ellos miembros de las fuerzas de seguridad.
El gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, que Macron tilda de “dictadura”, dijo aspirar a “que las instituciones francesas actúen respetando los derechos fundamentales de su población”, al tiempo que instó “al diálogo” para “prevenir el aumento de las tensiones”.
Maduro es acusado por sus adversarios de ordenar una “salvaje represión” contra una oleada de masivas protestas que dejó unos 125 muertos entre abril y julio de 2017 en el país petrolero.
Según el privado Observatorio Venezolano de Conflictividad Social, 12 personas fallecieron en el primer semestre de 2018 durante protestas por derechos económicos y sociales en medio de una grave crisis, con hiperinflación proyectada en 1.350.000% para 2018 y aguda escasez de alimentos básicos y medicinas.
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