Roger Federer ha acumulado una nueva cifra histórica a su infinito palmarés. Y es que el suizo ha alcanzado su victoria número 100 en las pistas del Open de Australia. Su último víctima ha sido este viernes el local John Millman, que había ejercido de verdugo del suizo en los octavos del US Open de 2018 y que ha puesto contra las cuerdas a su adversario en muchas fases del partido.
El duelo murió en una muerte súbita para recordar en la que el ganador remontó un 4-8 adverso con seis puntos consecutivos para llegar a la cuarta ronda. De hecho, admitió a la conclusión que ya estaba preparando el discurso para justificar la derrota.
«Me he visto perdido. John ha merecido la victoria y en el último punto escogió el lado equivocado», explicaba.
Federer, que se exprimió hasta para acabar ganando por 4-6, 7-6(2), 6-4, 4-6 y 7-6(8), sigue dispuesto a seguir luchando por mantener intacto su tope de 20 títulos de ‘Grand Slam’ que amenaza Rafael Nadal a tan sólo uno de empatar y con cinco años menos que el fenómeno de Basilea.
Roger es el primer jugador, hombre o mujer, capaz de ser centenario en victorias individuales en dos ‘majors’ distintos. A Wimbledon le ha unido hoy el Abierto australiano. Solo tres tenistas pueden presumir de haber ganado 100 partidos en alguno de los cuatro grandes de la raqueta: Martina Navratilova (Wimbledon) y Chris Evert y Serena Williams (US Open).
Millman no se rindió ni cuando la leyenda que tenía en el otro lado de la red le remontó un set de desventaja. Al tercer favorito parecía pasarle factura haber llegado a Melbourne sin preparación. El australiano, que volvió loca a la grada que llenaba la Rod Laver Arena, dio primero en la manga de desempate. Federer estaba especialmente errático. Se mascaba la tragedia.
El desenlace se marchó a la muerte súbita. Roger seguía acumulando fallos, especialmente con el revés. Millman ya se lo empezaba a creer.
Tomado de Marca.es
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