El Reino Unido se dispone a abandonar la Unión Europea el viernes, tras años de sobresaltos, giros, obstáculos y dramas protagonizados por una variedad de personalidades políticas.
Estos son algunos de los personajes de esta tragicomedia:
– Cameron vs los conservadores euroescépticos –
El entonces primer ministro David Cameron, defensor de la integración británica en la UE, propuso imprudentemente en 2015 convocar un referéndum sobre el Brexit para acallar la división que desde hacía años desgarraba a su Partido Conservador.
Gobernaba en coalición con los proeuropeos del Partido Liberaldemócrata y estaba convencido de que estos se lo impedirían.
Pero en las elecciones siguientes los liberaldemócratas desaparecieron del mapa y Cameron, solo al mando, tuvo que cumplir su promesa.
Convocó la consulta para el 23 de junio 2016. Hizo personalmente campaña contra el Brexit y tras su estrepitosa derrota dimitió.
– May acorralada por Miller y Bercow –
La ministra del Interior de Cameron, Theresa May, que pese a ser euroescéptica había hecho campaña contra el Brexit respaldando a su jefe, fue designada para sucederle.
Convencida de que era su misión cumplir con el deseo del 52% de británicos que votó por el Brexit pero respetando los temores del 48% que votó en contra, negoció un acuerdo con Bruselas que no satisfacía ni a unos ni a otros.
En un intento de reforzar su posición para poder hacer y deshacer, convocó
legislativas anticipadas en junio de 2017 convencida por unos sondeos favorables.
Pero perdió la mayoría absoluta y quedó a merced de un Parlamento fragmentado.
La activista proeuropea Gina Miller, directora de un fondo de inversiones de la City, había logrado, en una impactante batalla legal, que el Tribunal Supremo británico diese voz y voto en el Brexit al Parlamento.
Este, dirigido por el controvertido presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, al que se acusó de favorecer a los proeuropeos pese a su obligación de imparcialidad, rechazó reiteradamente el acuerdo de May, quien acabó dimitiendo en julio de 2019.
– Johnson, Farage y Cummings –
Boris Johnson, exministro de Relaciones Exteriores de May, de cuyo gobierno dimitió en desacuerdo con su estrategia ante la UE, tomó el relevo.
Junto al populista eurófobo Nigel Farage, del que intentó sin embargo mantenerse distanciado, había sido una de las principales figuras de la campaña probrexit, de la mano del gurú de la estrategia política Dominic Cummings, que se convirtió en su «consejero especial» una vez nombrado primer ministro.
Sufrió numerosos reveses parlamentarios y legales en sus primeros meses en el poder.
Pero, prometiendo un Brexit «a toda costa», consiguió renegociar un acuerdo con Bruselas que parecía inamovible. Y cuando no logró su aprobación a tiempo por el Parlamento, convocó legislativas en las que obtuvo una aplastante mayoría absoluta.
El Brexit es su gran victoria personal y lo legitima a nivel nacional e internacional, pese a su reputación de faltar alegremente a la verdad cuando le beneficia.
– Barnier, Juncker y Tusk –
Exministro francés de Exteriores y excomisario europeo, Michel Barnier fue rescatado del olvido en 2016 para liderar el equipo de negociadores encargado de acordar el Brexit con Londres.
Marcó su terreno estableciendo que todos los encuentros tuviesen lugar en Bruselas y que no se negociase la futura relación hasta que las condiciones del divorcio no estuviesen resueltas.
Resultó un negociador implacable y pretende seguir siéndolo durante la próxima fase, la discusión de un tratado comercial.
Como presidente de la Comisión Europea, el ex primer ministro luxemburgués Jean-Claude Juncker vivió el Brexit desde el principio y hasta que dejó su cargo en diciembre.
Lo hizo junto a su colega Donald Tusk, ex primer ministro polaco que presidió el Consejo Europeo de 2014 a 2019.
Conocidos por no morderse la lengua, los dos hombres tuvieron palabras impactantes y a veces polémicas sobre el proceso.
«Me he preguntado cómo es el lugar especial en el infierno para aquellos que defendieron el Brexit sin ni siquiera un esbozo de plan sobre cómo llevarlo a cabo», dijo una vez Tusk.
– Donald Trump y su intromisión –
El presidente estadounidense Donald Trump se invitó a la fiesta en varios momentos del este largo y caótico proceso.
Lo hizo para criticar la estrategia negociadora de May, aconsejándole optar simple y llanamente por un Brexit sin acuerdo, y para alabar a su «amigo» Johnson, a quien considera el hombre adecuado para la misión.
Tras el Brexit, es para él una «prioridad absoluta» negociar un acuerdo de libre comercio con Londres.
Fuente: https://ift.tt/3aCGwuO
No hay comentarios:
Publicar un comentario