El carnaval en Venezuela se mueve al ritmo del dólar, no de la samba. La movilización de temporadistas está por debajo de las expectativas señalan gerentes del sector hotelero, básicamente por la dolarización precios que hace muy complicado disfrutar del carnaval. La crisis no se enmascara.
Datos provenientes de alojamientos ubicados en los estados Sucre y Nueva Esparta apuntan que la ocupación hotelera se ubica en alrededor de entre 25% y 40%, según los precios. Los costos en las playas también son prohibitivos. Una familia de cuatro personas necesita más de 300 dólares para un fin de semana de sol y mar.
El precio promedio de los toldos en las playas está en alrededor de 5 dólares, mientras que un almuerzo de pescado puede alcanzar los 16 dólares por persona, alrededor de 1.150.000 bolívares como mínimo.
A pesar que el gobierno decidió apostar fuerte por el carnaval en el país para dar una imagen de tranquilidad, e incluso de recuperación económica, la realidad es que la movilización en los terminales ha sido más de 40% inferior al año pasado, según indican transportistas en el terminal de La Bandera, con el agravante de que la oferta de colectivos también es mucho menor. «Por eso hay colas», dijo un conductor.
Según AVN, la gobernación del ahora denominado estado La Guaira estima que 1.000.000 de temporadistas se han movilizado en este fin de semana largo al litoral caraqueño, donde se han organizado fiestas y comparsas, pero el comercio local no muestra el mismo furor. Las playas se ven concurridas, pero las ventas han caído duramente.
En Sucre, el ejecutivo nacional estima la movilización de 100.000 temporadistas. Reportes de años anteriores apuntan un promedio anual de alrededor de 200.000 vacacionistas. Playas mal mantenidas y el colapso de los servicios públicos han ocasionado que los destinos de la región ya no sean tan apetecidos, a pesar de su belleza natural.
La gobernación del Zulia decidió convocar comparsas con bandas show y carrozas. Según AVN, «más de 40 comparsas con expresiones musicales y las esperadas bandas show que combinaron la marcialidad con el espectáculo amenizaron cada uno de los desfiles realizados en Maracaibo; San Francisco, Mara y Francisco Javier Pulgar, entre otros municipios que brindan en este asueto una rica programación de actividades recreativas, deportivas y musicales».
«En Maracaibo, la avenida 5 de Julio fue el espacio para que escuelas, comunidades, instituciones públicas, mostraran su creatividad con comparsas entre las que destacaron las del folklore, la de las tradiciones y símbolos de Zulia».
No obstante, constantes cortes de luz y falta de agua, que en Maracaibo es prácticamente constante, aguaron la fiesta al gobierno local que movilizó a toda la administración pública para montar carrozas y templetes, los cuales congregaron básicamente a los mismos empleados públicos, sus familias y algunos curiosos, según reportes periodísticos independientes.
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