Ferroglobe, la empresa resultado de la fusión de FerroAtlántica y la firma estadounidense Globe Specialty Metals dedicada al negocio de silicio metal, se anotó unas pérdidas de 67.9 millones de dólares en los seis primeros meses del año, después de que en el último trimestre se apuntara un deterioro de 58.6 millones de dólares por sus negocios en Venezuela. Si se excluye este ajuste, las pérdidas semestrales se limitarían a 9.1 millones de dólares.
La multinacional, con base en Reino Unido pero cotizada en la Bolsa de Nueva York, se ha visto afectada por las pérdidas registradas en su actividad en Venezuela. La dirección de Ferroglobe está evaluando todas las opciones estratégicas sobre su presencia en el país, donde cuenta con la fábrica de ferroaleaciones de Puerto de Ordaz, la primera planta que adquirió FerroAtlántica fuera de España en 1998.
El grupo que controla Grupo Villar Mir (GVM), con el 57% del capital, obtuvo un beneficio bruto de explotación (ebitda) negativo de 46.6 millones de dólares en el segundo trimestre por este deterioro, lo que ha provocado que la cifra semestral registre también números rojos de 25.4 millones de dólares.
Los resultados de Ferroglobe se enmarcan en un contexto en el que los precios de venta del silicio metal cayeron el 6 por ciento en el último trimestre, debido fundamentalmente al empuje de China, que no pudo ser compensado por los significativos esfuerzos para impulsar la integración y reducir los costes de producción -estrategia que continuará en los próximos meses-. Precisamente, el grupo que dirige Pedro Larrea ha abandonado su actividad en China como consecuencia de la creciente competencia en este mercado y la caída mundial de la demanda. Así, ha paralizado la planta de Mangshi, al suroeste del país, y analiza ahora su venta, y ha desechado acometer el desarrollo de la nueva instalación de Ganzi, que se proyectó como la mayor fábrica de silicio metal del mundo.
Ferroglobe reanuda su actividad en Argentina
Frente a las dificultades en Venezuela, Ferroglobe ha conseguido renegociar con Argentina las condiciones en su fábrica de Mendonza, por lo que se reiniciará la actividad en esta planta, que paró en febrero por un incremento sustancial del precio de la energía.
Por otra parte, la junta del grupo ha aprobado mantener el dividendo trimestral de 0.08 dólares.
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