Hace tres meses llegó un nuevo embajador de Francia a Venezuela, Romain Nadal, y su presencia se ha hecho sentir. El joven funcionario asume su primera misión diplomática con ese rango. Antes de llegar al país fue el portavoz del ministerio de asuntos exteriores de su país.
Son muchas las reuniones que ha sostenido con políticos, artistas, deportistas, empresarios y grupos organizados de la sociedad civil que ha sostenido Nadal.
En reciente visita a Fedecámaras, el funcionario participó en la reunión de cámaras bi nacionales de industria y comercio asentadas en Venezuela. El presidente de esa institución, Carlos Larrazábal fue el anfitrión de la jornada.
El embajador Nadal expuso los planes el nuevo presidente de Francia, Enmanuel Macron, los cuales apuntan a promover reformas en la economía de esa nación, “con el propósito de adaptarla a los nuevos tiempos. Queremos reducir el gasto público en 3% y reducir la deuda en 5%.”-
“Nos hemos planteado que este proceso cristalice en 2022. La política social seguirá siendo importante y haremos énfasis en temas como el de garantizar el acceso a la salud, seguir promoviendo la transformación digital del país, entre otros aspectos”.
Una de las metas del presidente Macron es la de que los 30 mil inversores extranjeros que ha captado Francia en los últimos años “sientan que pueden seguir desarrollando negocios exitosos en la nación; somos una alternativa en Europa frente al Brexit (salida de Inglaterra de la Unión Europea) y queremos seguir captando inversionistas. El costo de una oficina en París es mucho más bajo que el de una en Londres. Somos la quinta potencia económica mundial y el segundo mercado europeo en seguros. Las instituciones financieras más importantes del mundo están presentes en París en donde se pueden desarrollar todo tipo de negocios”, dijo Nadal.
Aun cuando el entorno económico de Venezuela no es el mejor, el diplomático francés expresó que, en tiempos de crisis, el sector empresarial tiene la opción de reinventarse y de diversificar sus negocios. Por tal motivo invitó a los directivos e integrantes de las cámaras bi nacionales a invertir en su país, “incluso en Martinica, Guadalupe y la Guayana Francesa, que están muy cerca de Caracas y en donde las condiciones para hacer negocios son las mismas que ofrecemos en Francia”.
Nadal asegura que la política del presidente Macron es la de “acabar con los prejuicios que alguien pudiera difundir respecto a Francia. Al igual que en Venezuela, la presencia del Estado es fuerte y en nuestro caso queremos ser cada día más competitivos, por tal motivo se están promoviendo reformas en leyes que adapten el país a la globalización y a la nueva realidad mundial”.
En tal sentido explicó el Embajador que hay paradigmas por romper, “somos un mercado de 65 millones de consumidores, la quinta potencia económica mundial y la segunda europea en términos del Producto Interno Bruto, según el FMI y la Eurostat. Somos líderes europeos en creación de empresas. En 2013 se fundaron más de 538 mil y 275 mil bajo el régimen del auto emprendedor”.
En relación con los trámites administrativos que se requieren para iniciar un emprendimiento en el país galo, Romain Nadal explicó que “Francia forma parte de los países del G-20 en lo que es más fácil crear una empresa: solo son necesarios cinco procedimientos administrativos y siete días para que ésta se constituya frente a los 7,6 procedimientos y 22 días de media de otras naciones”.
Reformas necesarias
En tiempos de globalización en los negocios, los franceses se están preparado para que su mercado laboral se abra y flexibilice, que es una de las propuestas del presidente Marcon ante la Asamblea Nacional de Francia.
Al respecto, Nadal explicó que el “pacto de responsabilidad y solidaridad” permitirá reducir el costo del trabajo en 30 millones de euros respecto 2016”. Añadió que en 2014 el costo por hora de la mano de obra en la industria manufacturera francesa: 36, 81 euros era menor al de Alemania que se ubicó en 38,49 euros.
El diplomático señaló que es importante que el mercado laboral de su país se flexibilice y permita que los empleados y empresarios acuerden convenios en donde haya trabajos a tiempo determinado, por proyectos, con lo cual se mejorarían los sueldos y salarios.
“No es bueno que un trabajador tenga un puesto de empleo vitalicio, eso resta atractivo al mercado francés y a los potenciales inversionistas. En Francia hay más de 20 mil empresas internacionales que promueven negocios y movimiento de capitales que emplean a más de dos millones de personas y nuestra intención es que la cifra se eleve”.
El embajador Romain Nadal informó que según la revista Fortune, en Francia coexisten 200 empresas globales, “se trata de grupos muy variados presentes tanto en el sector energético como en el de la construcción y los seguros”, al tiempo que reiteró la invitación a los afiliados a Fedecámaras a invertir en una de las economías más sólidas de Europa.
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