El Observatorio de Conflictividad Laboral y Gestión Sindical del Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin), contabilizó para enero de 2020 un total de 93 protestas en todo el país, un promedio de tres diarias. Esta cifra representa una disminución de 9,7% en comparación con las 103 protestas que el Observatorio registró en enero de 2019.
El estado Lara encabezó el listado con 19, seguido de Distrito Capital (15) y Bolívar (9).
Las exigencias por un salario acorde con las necesidades básicas de los trabajadores fue la causa más recurrente durante los conflictos de enero, con un 63,4% de los casos. Esto a pesar del aumento del salario mínimo integral de 50% a partir del 1 de enero que llevó ese ingreso de Bs 300.000 a Bs 450.000, pero que fue anulado por la inflación del mes, que de acuerdo con la medición de la Asamblea Nacional fue de 65,4%.
En términos reales, el salario mínimo integral terminó enero en el equivalente a 6 dólares, según la tasa de cambio del Banco Central de Venezuela.
El renglón Otros motivos ocupó el segundo lugar con 12,9% y condiciones laborales el tercer puesto con 10,8%.
En Otros motivos se incluyen problemas con el pago de la pensión, ataques a los trabajadores de la prensa, extorsiones por parte de militares, jubilación forzosa, corrupción, muerte de un compañero en jornada laboral, militarización de empresa y restricciones al acceso del lugar de trabajo.
El sector educativo lideró la conflictividad laboral del mes con 40,9% de los casos, seguido por el sector salud y las empresas básicas, ambas con 12,9%. Las razones se explican en la negativa del empleador a darle solución a las necesidades mínimas básicas.
Desde comienzos de año los educadores han anunciado actividades de calle. Sin nada que celebrar los representantes del magisterio tomaron las calles a nivel nacional el día 15 (Día del Maestro) y continuaron en protesta los días 16 y 17 de enero sin descanso alguno.
El mayor empleador en el país es el propio Estado, que mantiene en descontento a sus trabajadores.
El sector público estuvo involucrado en 92,5% de los conflictos, mientras que el sector privado en 7,5%. En la mayoría de los casos (59,1%) la protesta estuvo apoyada por los sindicatos.
La toma de calles es la modalidad de protesta más utilizada con 38,7%, luego las denuncias informales (37,6%) y los paros con 15,1%. Estas acciones fueron reprimidas y se proyecta que se mantenga esta actuación de parte de los cuerpos de seguridad.
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