El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó hoy al inaugurar en Pekín un foro de negocios con empresarios chinos que su país «cambió para mejor» desde que asumió el cargo y destacó que quieren diversificar sus relaciones con el país asiático, primer socio comercial del Estado latinoamericano.
Bolsonaro anunció, además, que han decidido exonerar de visado a los ciudadanos chinos para los viajes de turismo y negocio a Brasil, lo que demuestra, dijo, «la confianza» de su Gobierno en el país asiático.
La exoneración de visados es una medida que Brasil ya ha puesto en marcha con Estados Unidos, Japón, Australia y Canadá y que prevé igualmente aplicar a la India, según dijo el presidente en declaraciones a los periodistas.
Bolsonaro, que durante la campaña electoral para la presidencia brasileña había afirmado que China «estaba comprando Brasil» ha moderado considerablemente su tono desde que accedió al cargo a causa de las estrechas relaciones económicas que mantienen ambos países.
El presidente agradeció vivamente el apoyo del embajador chino en Brasil, Yang Wanming, por «reconocer» la soberanía de Brasil sobre la región amazónica «en un episodio reciente con ocasión de la reunión del G7».
«Muchas gracias al Gobierno chino. Para nosotros no tiene precio ese reconocimiento público y sus palabras sobre esa región tan importante para el mundo y para Brasil», dijo.
Afirmó que se siente «honrado y feliz» de estar en China y que su presencia «es una prueba concreta» de que su Gobierno quiere «más que aumentar, diversificar» su entorno de negocios.
«No hay país que no quiera conversar con nosotros, a fin de cuentas Brasil cambió y cambió para mejor», aseguró.
El presidente resaltó que el «perfecto» entendimiento entre el Legislativo y el Ejecutivo brasileños permite aprobar reformas como la recientemente ratificada en relación con la presidencia, y anunció que «en breve» se pondrán en marcha otros cambios fiscales y administrativos.
Resaltó que «los números no mienten» en relación con los cambios en su país y que los tipos de interés han llegado «a un nivel nunca visto antes» del 5,5 %, mientras que la inflación «está por debajo» del objetivo, lo que «prueba que fue definitivamente domada».
Añadió que el riesgo país también disminuyó, que están reduciendo el desempleo y «alcanzando niveles nunca vistos a corto plazo».
«Esto trae previsibilidad, confianza y certeza a los que quieren invertir en Brasil», señaló.
Por su parte, el ministro de la Casa Civil, Onyx Lorenzoni, afirmó en el foro de negocios que la asociación con China es «muy importante» para Brasil, un país, dijo, que «está diferente», «más seguro y con un marco regulatorio claro».
Lorenzoni aseguró que su país «está con las puertas abiertas para que esa asociación sea cada vez mayor», y recalcó que «no hay riesgo para la inversión que se hace en Brasil».
El viceprimer ministro chino, Hu Chunhua, resaltó que ambos países son «socios naturales», e instó a reforzar su cooperación en foros como el de los BRIC o el G20.
Bolsonaro se reúne esta tarde en Pekín con el presidente chino, Xi Jinping, y con el primer ministro, Li Keqiang.
China es desde 2009 el mayor socio comercial de Brasil, con un intercambio bilateral que en 2018 alcanzó los 98.900 millones de dólares, y que entre enero y septiembre de este año ya ha sumado casi 70.000 millones de dólares.
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