La agencia Moody’s Investors Service subió el miércoles la calificación crediticia de Argentina a “B2” desde “B3” por el impulso de reformas económicas que “están comenzando a lidiar con distorsiones de larga data de la economía”.
La perspectiva para la nota es estable.
“La combinación de estas reformas ha impulsado las perspectivas de crecimiento económico. El Gobierno tiene además como objetivo reducir el déficit fiscal en 2018 y 2019”, dijo la agencia en su reporte.
La nota de Argentina sigue limitada por un déficit fiscal que aún es alto y la dependencia en el financiamiento externo.
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